domingo, 18 de mayo de 2014

...¡¡Diversión a tope!!...

Todas las previsiones fueron favorables lo que ayudó a  que  la experiencia resultara fascinante.
Nos acompañó el día, para que todo lo previsto saliera a las mil maravillas, incluidos vosotr@s piezas únicas para que nuestra  satisfacción sea completa.
No puedo olvidarme de dar las gracias a Carlos por su entusiasmo por la Bahía de Santander  y a Santiago López-Vázquez por darnos la oportunidad de ver las instalaciones del futuro mundial de vela, un magnífico anfitrión  y a Marina Alabau que nos acompañó y vimos  de cerca a una campeona olímpica.
Al leer las opiniones de nuestro cuaderno privado me  ha resultado difícil elegir una porque había varias que estaban magníficamente redactadas con interesantes opiniones. No os perdáis su lectura, si tenéis un rato.

¡¡Hola amigos!!
Hoy he hecho una salida verdaderamente buena ¿queréis leerla? pues estad bien atentos. Si no entendéis algo ponerme un comentario por favor.
Bueno, dejaros de charlas y leed bien mi viajera experiencia. Y os recomiendo leerla..... ¡¡¡mecachis!!! He vuelto a alargar la historia. Por favor lean bien.
Todo empezó el viernes cuando fui a la escuela para irme de excursión con el curso de 5º. Primero, me fui en autobús, y allí estuve charlando con mis amigos. La estancia en el autobús se me hizo corta.
Cuando llegamos al puerto y entramos en barco empezó toda esta maravillosa experiencia. El barco era muy cómodo, también el viaje fue agradable, menos en mi parte favorita que parecía que el mar se había enfadado con nosotros… Las olas eran inmensas y el gran tambaleo del barco a algunos les dio naúseas. Después de aquel alboroto llegamos a la isla de Mouro, bastante chula. Nos dijeron que, a veces, cuando había mucho movimiento en el mar, las olas cubrían la isla entera.
Más tarde fuimos a las instalaciones de vela para contemplar el maravilloso lugar en el que se llevará a cabo el mundial  de vela. Me sorprendió mucho ver a los concursantes tan pronto porque el mundial es en Septiembre, y entonces me pregunté ¿por qué no vienen en verano?
Cuando entramos en las instalaciones me quedé boquiabierto, ¡eran increíbles! Con tabla de mundiales y todo lo que un deportista puede soñar.
Después dimos un paseo por la playa y algunos metieron los pies en el agua. También fuimos al parque donde había muchas torres de cuerdas.
Jorge nos quitaba los zapatos y los lanzaba, fue divertido. Además, monté en una especie de asientos giratorios.
Lo peor de esta aventura ha sido la vuelta al colegio porque por mí, me hubiese quedada todo el día allí.
Un saludo para nuestros amigos zahoríes de vuestro compañero Unai.

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